La gestión de una herencia es un tema complejo, hay dos conceptos que van íntimamente relacionados, por desgracia para nuestro bolsillo: testamento e impuestos.
Testamento e impuestos: ¿qué impuestos tengo por delante?
En principio, los dos impuestos principales que se deben tener en cuenta son el impuesto de sucesiones y el “Impuesto sobre el incremento del valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana”, también conocido como “plusvalía municipal”.
Estos son los impuestos que, normalmente, hay que pagar al tramitar una herencia, aunque hay que tener cuidado: si el reparto no está bien hecho puede que haya que liquidar algún otro impuesto.
Impuesto de sucesiones
El impuesto de sucesiones es un impuesto que se rige por una Ley Estatal, pero cuya gestión está transferida a las Comunidades Autónomas, y éstas han legislado sobre este impuesto de manera que en cada Comunidad Autónoma existen especialidades.
En Madrid, desde enero de 2006, existe una bonificación sobre la cantidad a pagar del 99% siempre que el heredero sea cónyuge, ascendiente o descendiente. Es una bonificación que afecta, tanto a sucesiones como a donaciones.
Todos los años existen rumores de que va a desaparecer la bonificación, lo que provoca que muchos clientes quieran hacer una donación de los bienes inmuebles a sus hijos para conseguir acogerse a esa bonificación. Sin embargo, esa “maniobra” tiene otros inconvenientes que puede hacer que esa donación salga muy cara, tal como expliqué hace unas semanas.
Gestión del impuesto de sucesiones
Para liquidar este impuesto se puede presentar una autoliquidación, o sea un impreso que se rellena y se paga (como el IRPF) por todos los herederos (y legatarios), pero para ello tienen que estar todos de acuerdo.
Si existe ese acuerdo, se tiene que rellenar el impreso 650, pagar el importe que salga y presentarlo ante el organismo competente.
El impreso 650 es bastante complejo, puesto que existen multitud de detalles a tener en cuenta, además de ser un impreso que no resulta habitual rellenar. En la web de la Agencia Tributaria tienen un archivo pdf del impreso.
Lo habitual es que las Comunidades Autónomas creen un programa para liquidar el impuesto, pero es un programa que resulta muy engorroso de utilizar. Si tienes problemas y quieres que te eche una mano con el impuesto o con la herencia, ponte en contacto conmigo.
Ten en cuenta que, dependiendo de como hayas distribuido la herencia o de los valores que hayas indicado, puede salir a pagar una cantidad mayor o menor atendiendo a las diferentes bonificaciones que existen.
Aunque te parezca increíble, hay veces que, pagando más impuesto de sucesiones, el total a pagar por todos los impuesto puede ser inferior, puesto que se puede reducir el importe a pagar por “plusvalía municipal”.
“Plusvalía municipal”
Este impuesto es de carácter municipal y el detalle del mismo lo aprueba cada Ayuntamiento; así que para calcularlo tendrás que acudir a las Ordenanzas Municipales, preguntar en el Ayuntamiento o, como ya te he comentado, te puedes poner en contacto conmigo.
¿Cómo se calcula la plusvalía municipal?
El importe a pagar se calcula atendiendo al valor catastral del suelo y al tiempo que el fallecido haya sido dueño del inmueble (con un límite de 20 años).
En cuanto al valor catastral de suelo, en todos los recibos del IBI aparece el valor catastral, el valor del suelo y el valor de la construcción.
Ojo con el importe del impuesto.
Por desgracia, los clientes no suelen darle importancia a este impuesto, pero hay que tener mucho cuidado, puesto que el importe puede ser muy elevado.
Por ejemplo, en Madrid, el importe a pagar puede ser el 17,40% del valor catastral del suelo, así que, para el inmueble con los datos catastrales que aparecen más arriba, el importe a pagar podría llegar a 22.340 euros
Existen maneras de que esa cantidad se reduzca, pero hay que tenerlo en cuenta a la hora de distribuir los bienes en la herencia y no a la hora de pagar el impuesto. Por eso es importante una buena planificación fiscal a la hora repartir la herencia.
Hay que tener mucho cuidado con el testamento e impuestos para evitar sorpresas desagradables. Reitero que te aconsejo que te asesores. Posiblemente te salga más barato pagar un buen profesional que tributar por unos impuestos mal gestionados.